Cuentos de la Revolucion Mexicana por Sergio Gonzalez Rubiera

Hace un par de años que vengo trabajando como conferencista y consultor en el Estado de Morelos, hogar de la hermosa Ciudad de Cuernavaca, aclaración que hago para quienes leen estas líneas allende las fronteras y que es más probable hayan escuchado el nombre de esa ciudad que el de la entidad federativa a que hago referencia. Cuernavaca, y Morelos en lo general se distinguen y se han hecho populares entre otras cosas, por su maravilloso clima, lo que le ha merecido a esta ciudad el calificativo de "la ciudad de la eterna primavera". Así también, gozan de magnífico clima Cuautla, Tepoztlán, Cocoyoc y Oaxtepec, entre muchos otros atractivos destinos del Estado, por lo que en consecuencia, se han caracterizado por contar con una basta oferta de balnearios, piscinas y desde luego magnífica y exuberante vegetación.

Lamentablemente, como en muchos casos en México y en Latinoamérica hay una tremenda ausencia de Desarrollo de Productos Turísticos, falta de imaginación y desdén de las autoridades por la mejora de las infraestructuras. El Estado de Morelos tiene un enorme potencial turístico, además de por su envidiable clima todo el año, por su riqueza histórica y cultural que se puede apreciar en su arquitectura colonial, en viejas fachadas y por su inventario de casonas y antiguas haciendas, entre otras cosas.

Este conjunto de potencialidades le pueden permitir a ese Estado el desarrollo de interesantes segmentos de mercado turístico internacional, pero es menester el rescate de los espacios públicos, la recuperación de la imagen urbana, hoy saturada de anuncios publicitarios de todo tipo y de manera especial la puesta en valor de edificios y fachadas de enorme belleza y valor histórico. En breve me reuniré con Presidentes Municipales de la zona oriente del Estado y esperamos, empresarios turísticos y este consultor tener suerte y encontrar apertura y disposición en los recién llegados ediles.

Actualmente se trabaja en el proyecto turístico Ruta de Zapata, emblemático personaje de la Revolución Mexicana y el mismo se antoja interesante, pero falta mucho por hacer, por capacitar, por rescatar y por embellecer.

El tema Zapata es interesante y atractivo por donde se le mire, pues Don Emiliano, además de haber nacido en el Estado de Morelos es sin duda un personaje cautivador, emblemático del movimiento revolucionario en México, controvertido sin la menor duda, que pasara de ser el "Atila del Sur" al "Caudillo del Sur", que transitara en el sentir de los mexicanos de entonces y los de ahora entre héroe y villano, de implacable con el machete y el fúsil, a líder de las causas justas y defensor de los derechos de los más necesitados, utilizando como arenga la frase "Tierra y Libertad" que se le atribuye a él, aunque realmente es de la autoría del periodista Ricardo Flores Magón quien la utilizara repetidamente en sus artículos por aquellos mismos años de la revolución. Pareciera también que "Tierra y Libertad" tiene orígenes Rusos. "Zemlya i Volya" se propagó por todo el imperio, fundándose en 1876, en San Petersburgo, el movimiento popular que llevó ese nombre y que tanta influencia tuvo en las luchas que culminaron en la revolución de 1905".

Pero volviendo a Emiliano Zapata, mis ocho lectores deben saber que en 1914 se celebra la famosa Convención de Aguascalientes, en la que Venustiano Carranza convoca a todos los líderes insurrectos destacando entre ellos Pancho Villa y Emiliano Zapata, a efecto de hacer un gran pacto nacional, intento que fracasa y en el que ambos caudillos, el del norte y el del sur desconocen a Carranza.

Luego de ello vendría una época en la que México tendría practicamente dos gobiernos, uno que a la postre fuera el oficial, el de Carranza, que se instala en la Ciudad de Veracruz que por entonces se constituyera en la Capital del País y otro en Palacio Nacional en donde fungiera como Presidente provisional el General Eulalio Gutiérrez elegido por zapatistas y villistas.

Como testimonio de estos avatares del México Revolucionario, llegaron a mis manos hace unos días un par de manuscritos de 1915 y 1916 y que constituyen una joya familiar al tiempo que histórica. Familiar por que el autor de los escritos es Don Felipe Tadeo Gómez, bisabuelo de mi esposa, abuelo de mi suegro, Don Jaime Gould Taylor Tadeo e histórica desde luego por las fechas y contenido de las misivas, y es por ello que me permito compartir fragmentos de ellas con mis ocho lectores.

Dice de su puño y letra con tinta china y con manguillo, el 15 de noviembre de 1915, Dn. Felipe Tadeo a la Sra. Manuela R. de Tadeo su "Muy estimada y querida esposa" entre otras cosas, luego de la introducción y los amorosos saludos, lo siguiente:

"dile a Ángel que al llegar los cigarros mire a ver como los vende, pues en México, no hay. Yo personalmente fui a la fábrica del Buen Tono y no había existencia ni hay. Los compré en un estanquillo sitio en la 7 de Santo Domingo. Importaron los 60 paquetes $210. Pesos y $12 doce pesos de gastos más 3. Pesos que he gastado en viajes a la casa. Aquí se venden los cigarros del buen tono a 40 y 50 centavos cajetilla y los Supremos a 60 y 65 centavos cajetilla, así que según están de caros, así mire como los venda, pues tuve que cogerlos surtidos porque no había de las marcas que deseaba…."

En otro párrafo más adelante dice a la letra: "He hecho mucho por irme y no me ha sido posible pero ya fueron a traer al primer Jefe, tan pronto llegue a México nos iremos para Veracruz pues tiene un mes que no me toca combate, pues todos los días se están rindiendo Villistas y los Zapatistas…. (parte ilegible)… ya México está muy animado y hay mucha gente. Cuando llegamos raro el que después de las 9 de la noche andaba en la calle"…. Algunos párrafos más adelante se despide.

De la segunda misiva, fechada en Cuautla de Morelos el 5 de Mayo de 1916, rescato dos fragmentos para usted:

"No creas que no he ido a verte por falta de cariño, he pedido permiso y me ha sido negado, y en vista de eso pedí mi baja al General manifestándole enfermedad de mi familia en tierra ajena y la pobreza mía para atender a mis necesidades y la de la familia y por contestación obtuve el haberme dicho que oficiales como yo no se dan de baja al frente del enemigo, y que él también tenía su familia y yo le contesté que sería cierto pero que en cambio tenía dinero lo cual me faltaba a mí, pues ni así me dio de baja, así es querida esposa que hay que conformarse con lo que Dios quiera. Yo estoy triste no porque tenga miedo sino porque ya deseo retirarme a la vida privada con mi familia que es todo mi querer."

En otro fragmento de la carta que me parece relevante por su significado histórico, Don Felipe narra lo siguiente:

"Tomamos a Cuautla sin mayor derramamiento de sangre, pues hiciéron una leve resistencia, arreglado que no fue el combate ni la décima parte del que hemos tenido en Zotolapan y Tlayecapan, pero si vieras esta pobre Ciudad te daría espanto las casas, una gran parte quemadas, las tiendas vacías, sin nada, los pocos habitantes que quedaron están en la más completa miseria, da esto lástima.

Ya es tarde, me despido. Tu esposo que te quiere y verte desea. Cuida las niñas que no se anden cayendo." Firma Felipe Tadeo.

Me he permitido corregir algo de la ortografía y parcialmente la puntuación original para hacerla más entendible y clara a los lectores, y estamos escaneando los manuscritos originales para salvaguardar los textos y para incluirlos completos en lo que muy pronto será "Al Buen Entendedor", el libro, ya le contaré.

De ambas cartas aquí presentadas se puede inferir que Don Felipe Tadeo Gómez estaba en las filas del Gobierno Carrancista y que en consecuencia estaba comisionado a combatir contra los grupos insurrectos de Zapata en el Estado de Morelos.

Cómo información adicional le cuento a mis ocho lectores, que Felipe Tadeo fue Presidente Municipal de Coatzacoalcos, Veracruz de 1924 a 1925, posteriormente como parte de una Junta de Gobierno en 1928 y por tercera ocasión entre 1932 y 1933. Tengo a la vista su credencial como miembro del Comité de Defensa y Unificación de la Población Civil de Coatzacoalcos fechada en junio de 1942, sus acreditaciones como miembro del PRI en 1949 y su acta de defunción.

Así que mire usted querido lector, en este año del centenario de la Revolución, me encuentro por un lado, cercano a la tierra del "Caudillo del Sur" y por otra parte frente a este hallazgo histórico que saliera de entre las cajas de los recuerdos y que hoy comparto con mis ocho lectores.

Cualquier comentario con esta columna que hoy anda entre papeles amarillentos y olorosos a humedad, favor de dirigirlo a: sgrubiera@acticonsultores.com