Alternativa; del diccionario, Opción, disyuntiva.

En el lenguaje taurino; Acto por el cual el matador consagra al novillero como espada.

Ambas acepciones se antojan válidas para el tema que nos ocupa, aunque la última, claro está, una metáfora, en donde nuestro Caribe es el novillero que de una vez por todas y para siempre deberá consagrarse al tomar la espada como Destino Turístico de clase mundial, una vez que ha sido reconocido por los expertos.

Decimos que la actividad turística es una gran alternativa de desarrollo para los Países del Caribe, toda vez que contribuye no sólo en el crecimiento económico, a partir de las inversiones, la generación de empleos y la derrama de divisas, sino en la preservación de las culturas al ser éste, elemento per sé de desplazamientos con fines turísticos y se enriquece el conocimiento y desarrollo humano a partir de la diversidad de pensamientos, rasgos culturales, diferencias geográficas y motivaciones del tiempo libre que significa el turismo.

Alrededor de 640 millones de viajeros en el mundo en 1998, 700 millones en el año 2000 y cerca de 1600 millones para el año 2020, son algunas de las cifras proporcionadas por la OMT (Organización Mundial del Turismo), que nos hacen reflexionar acerca del impresionante crecimiento de la actividad turística.

Cada día son más y más los Países que han cifrado sus esperanzas de éxito en esta actividad, y son cada día más los destinos que se suman al amplio menú de posibilidades para los vacacionistas del mundo.

Para la región del Caribe en su conjunto, el turismo representa además una gran alternativa de desarrollo económico, a partir del surgimiento de nuevas y muy significativas tendencias en el comportamiento y hábitos de los consumidores en general.

Si bien el turismo ha significado grandes desplazamientos masivos de visitantes a todas las regiones del mundo, todo hace suponer que hay una gran revaloración de lo auténtico, de un regreso a los sistemas más básicos y se observa ya un cierto rechazo a la masificación.

Ante tal escenario los grandes destinos turísticos de clase mundial, y las grandes urbes posicionadas como "favoritos" del turismo internacional, han tenido que recurrir a novedosas y agresivas estrategias de marketing, a la explotación de sus ya escasos recursos naturales y en algunos casos hasta a la artificialidad.

El impresionante y vertiginosos avance tecnológico, ha generado en consecuencia turistas en búsqueda de lo natural, lo auténtico y lo alejado de la saturación tecnológica y comercial, pero al mismo tiempo más exigentes de la Calidad, la vanguardia, la velocidad de respuesta, y los productos y servicios a la medida.

El Ocio a la medida es entre otras cosas producto del Internet, y esto sin duda ha matizado el comportamiento de todos los viajeros del mundo.

La alternativa para los Países y Regiones del Caribe de cara al turismo se presenta al ser una región que cuenta de sobra con todos los recursos y atractivos que el nuevo turista desea ver.

No únicamente Sol, Mar y Arena, elementos que per sé ya hacen único al Caribe, sino el conjunto de recursos que responden a las nuevas tendencias en turismo están presentes en esta zona del mundo.

Selvas, veredas, impresionante y exuberante vegetación, fauna terrestre y marítima que satisface a los observadores más exigentes, ríos, valles, montañas, lagunas, un amplio y exquisito menú de monumentos históricos, sin dejar de mencionar el importante legado de la misteriosa y sabia Cultura Maya, presente en Zonas Arqueológicas y Museos; vestigios de la colonización Europea en fuertes , murallas y catedrales, típicos malecones caribeños, rica gastronomía con recetas que van desde lo prehispánico hasta la influencia más afrancesada, pero de manera muy especial la gente.

Singulares comunidades a lo largo y ancho de todas las Islas del Mar Caribe, que significan costumbres, dialectos y prácticas ancestrales, ejemplares villas de pescadores con sistemas de organización muy particulares, diversidad de etnias, comunidades mayas y en general una Cultura digna de apreciar.

A la vista de lo expuesto, el Caribe tiene una gran oportunidad de aprovechar las muy particulares tendencias de la demanda, adecuando sus productos turísticos, dotándolos de tecnología vanguardista que lo coloque entre las preferencias mundiales de el turismo, sin abandonar sus raíces y preservando sus entornos naturales y riqueza histórica.

Pero el Caribe también tiene una alternativa de desarrollo en el turismo como pocos destinos, a partir de la sinergia de acciones conjuntas entre los pueblos y Países que lo conforman, hasta el punto de diseñar acciones de comercialización compartidas, y como condición especial el presentar la oferta Caribeña agrupada, como un Producto Turístico Integrado, haciendo frente a las regiones más consolidadas y maduras.

La palabra Caribe está posicionada en los Mercados Turísticos Internacionales, y con ella, las bellezas paisajísticas y beneficios de descanso y diversión que representa, pero no así algunas de las Islas, Países y Regiones que lo conforman, de forma tal, que este posicionamiento debe ser canalizado adecuadamente y significar flujos de turismo para todo el Caribe y sus habitantes.

Transferencia de tecnología, economías de escala, intercambio de información, estudios de mercado, investigación y desarrollo, son sólo algunos de los beneficios que puede producir la Sinergia Caribeña, pero sobretodo y de manera especial una Estrategia de Marketing unificada que signifique mayores flujos de turismo, incremento de las estancias promedio y derrama de divisas para toda la región.

El Turismo es la Gran Alternativa ...

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